Yuma vuelve a su casa después de mucho tiempo para tomar un descanso de sus aventuras en las ruinas. Pero su descanso es temporal tras ver a su maestro Roku en TV, quien revela una estatua del comandante Kiraku de los Estados Combatientes de hace 500 años, que ha sido encontrada en el Santuario del Duelo y que tiene un gran parecido con el Barian Guerrero, Girag.
Cuando Yuma y Astral se apresuran para llegar al lugar, Girag los está esperando y ahora, para defender el "Número", Yuma lo desafía a un duelo, pero parece que Girag ha sido poseído por algo.